El equipo concentrado para intentar la remontada.¹
El miércoles pasado, el verdolaga vivió una de las noches futbolísticas más terribles en los últimos tiempos. Itagüí lo vencía 4-0, y en el mismo Atanasio Girardot. Los hinchas verdes se hundían en sus sillas mientras los de las "Águilas doradas" saltaban alborozados como pocas veces en su vida. Sin embargo, el fútbol es una de la instancias de la vida donde la revancha suele aparecerse frecuentemente...
Hoy, Nacional tendrá la posibilidad de sacarse la espina; de apostar al "doble o nada". En el mismo lugar y a la misma hora. Será el segundo y definitivo round de un combate en el cual el equipo de la Segunda División marcha con ventaja considerable. Por eso, para tratar de igualar la balanza, José Fernando Santa enviará al campo de juego a prácticamente toda la nómina titular verdolaga, en la misión utópica de remontar cuatro goles y llegar ilesos a las semifinales de la Copa Colombia.
El duelo ante Itagüí fue el accidente doloroso que ningún corazón verdolaga quería presenciar pero que terminó espabilando unos cimientos inestables, y el arreglo vino sobre la marcha: en plena Liga Postobón y ante Huila, una de las revelaciones de la competencia. El resultado ante los "Opitas", asimismo, marcó el doble cachetazo para terminar de despertar a una escuadra que estaba llena de inquietudes y que el hincha verdolaga espera que, gracias a esto, se comiencen a despejar todas las dudas.
Como Nacional es un equipo muy grande, está expuesto casi siempre a las pruebas de fuego. El partido contra el Medellín quizás fue el primero. Y se ganó, pero aun así no terminó de convencer a una parte de la hinchada que es consciente de que el 1-0 estuvo más relacionado a la frase de "El fin justifica los medios".
Tres días después, todavía en medio de la alegría post·clásico, la sospecha y el fútbol pragmático de Itagüí mandaron abajo la supuesta solidez de un Nacional que -sorpréndanse los incautos- es el cuadro visitante más goleado de la actual Liga Postobón, con once goles en cuatro partidos. Tendencia que dejó ver toda su desnudez en el cotejo de ida ante el equipo "industrial".
Ahora, abrigarse a la esperanza cuando se enfrenta un 0-4 revela ciertas actitudes candorosas. ¿Cómo sujetarse a algo así? ¿En el imaginario positivo de lo "impensado del fútbol"? ¿Por qué creer que Nacional hará cuatro goles en un partido? ¿Cuántas veces lo hizo cuando Santa estuvo como técnico verde? Son palabras que serán ultrajadas si Nacional, en un acto de orgullo, épica y buen fútbol, logra una diferencia suficiente para instalarse en la siguiente ronda.
Personalmente estoy en ese dilema, y tengo dos caminos. Creer o no creer: me meto una vez más en el traje de hincha y me pongo en el bando de los que son "creyentes", o me resisto al espíritu embriagante del hincha futbolero y me sitúo en la orilla de "los ateos"... ¿La primera variable? Bueno... en ese panorama tan poco agradable y absurdo, con un 0-4 que te espera con los brazos abiertos, y cerca de la humillación casi tangible, parece que me sumergiré. Haciéndome espacio como un borrego más. Porque esta situación del juego de vuelta frente a Itagüí muestra ese rostro: el de la resignación. El de la resignación de cualquier hincha. ¿O es del fruto prohibido, producto del encandilado fútbol colombiano?
Con toda la "pesada"
El verdolaga saltará a la cancha del Atanasio con sus titulares habituales, salvo Gastón Pezzuti, quien todavía no se ha recuperado de la molestia que tuvo en el partido ante Huila. El reemplazante será Franco Armani, argentino de 23 años y ex portero de Ferro Carril Oeste, quien llega a esta situación por la producción de Eduardo Blandón en los últimos dos partidos -Itagüí y Huila-, en los que recibió seis anotaciones. Una decisión de sacrificio, visiblemente.
Curiosamente, Itagüí tampoco contará con la presencia de su atajador titular, Jaime Bran Gómez, por la expulsión que sufrió en el partido de ida. Su lugar, entonces, será ocupado por Roberto Mosquera. El resto de la nómina será la misma que generó la hecatombe de hace ocho días. De la misma forma, Álvaro de Jesús Gómez ha puesto a jugar grupos alternos en los partidos del Torneo Postobón, aprovechando que ya están clasificados a los cuadrangulares desde hace varias fechas. El fin de semana pasado jugaron de visitante ante Barranquilla -colero del torneo- y ganaron 0-2, con un par de anotaciones del "Tigrillo" Castillo.
Formaciones
Nacional: Armani; Piedrahita, Mosquera, Santín e Iglesias; Córdoba y el "Viejo" Patiño; Ibarbo, Pabón y Mondaini; Maggiolo.
Itagüí: Mosquera; Arboleda, Zapata, "Jeringa" Guzmán y Manga; 'Ganiza' Ortiz, Restrepo, Alzate y Chamorro; González y Páez.
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